Atender a la población desfavorecida no ha sido un camino de rosas, pero los beneficios superan con creces los retos

Todo empezó en febrero de 2021, cuando decidí dejar mi país natal, Sierra Leona, para trabajar como voluntaria con la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Somalia. ¿Mi objetivo? Atender a las personas de interés más vulnerables de las comunidades de difícil acceso. Entre ellos suelen encontrarse refugiados, solicitantes de asilo, apátridas, desplazados internos y retornados, según el ACNUR.

En el ACNUR hay un dicho: "Proteger es lo que hacemos, y lo hacemos a través de programas". Con formación en gestión del desarrollo, tengo el privilegio de poner en práctica mis conocimientos y aptitudes como Voluntaria de las Naciones Unidas Oficial Adjunta de Programas con el ACNUR en Somalia.

Dotar de rostro humano a la lucha contra la violencia de género

El Día Mundial de la Asistencia Humanitaria es algo más que un día de reconocimiento a los cooperantes que dedican su vida a causas humanitarias. Es un día para recordarnos que los trabajadores humanitarios no solo hacen que el mundo sea más seguro, sino también más equitativo e inclusivo. Entre ellos se encuentra Emmanuel Egorp, Voluntario de las Naciones Unidas, nigeriano de 39 años comprometido con la lucha contra la violencia de género mediante su implicación diaria con las comunidades.

Emmanuel es Voluntario de las Naciones Unidas nacional Especialista del Programa contra la Violencia de Género del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA). Apoya la programación de intervenciones innovadoras de prevención, mitigación de riesgos y respuesta de calidad en los estados de la Bahía de Nigeria (Borno, Adamawa y Yobe).

Contar la historia de las personas atrapadas en desastres, respuesta y recuperación

En agosto y septiembre de 2018, las provincias indonesias de Nusa Tenggara Occidental y Sulawesi Central se vieron sacudidas por potentes terremotos que destruyeron varios edificios, se cobraron miles de vidas y desplazaron a decenas de miles de personas. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) puso en marcha inmediatamente medidas de respuesta de emergencia, y un Voluntario de las Naciones Unidas intervino para contar la historia.

Entre sus muchos mandatos, el PNUD trabaja con las comunidades en crisis para ayudar a gestionar y reducir los riesgos, y colabora con los gobiernos nacionales y locales de todo el mundo para incorporar la resiliencia y la recuperación en su respuesta a las crisis. Al desplegar personal sobre el terreno de inmediato tras el inicio de una crisis, el PNUD vincula la respuesta humanitaria a la recuperación a largo plazo.

"La única manera de alcanzar los ODS es pueblo a pueblo, voluntario a voluntario"

Michael Emery prestó servicio como Voluntario de las Naciones Unidas en Liberia y Guinea de 1990 a 1991. Desde entonces, ha hecho carrera en las Naciones Unidas y se ha cruzado repetidamente con el programa VNU y los Voluntarios de las Naciones Unidas. Voluntario de las Naciones Unidas por pasión y docente de profesión, Michael, actual Director de Recursos Humanos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), reflexiona sobre su trayectoria.

A los 25 años, era profesor en Australia y ansiaba experimentar algo nuevo. De repente, me ofrecieron la oportunidad de enseñar en una escuela misionera del centro de Liberia. ¡Recuerdo que fui a una biblioteca cercana para comprobar dónde estaba Liberia en el atlas!

Fue una experiencia muy real, fuera de mi zona de confort y en una situación que desafiaba todas mis suposiciones y normas culturales. Me instalé en Gbarnga, en el centro de Liberia, para enseñar a niños tan deseosos de aprender como de divertirse. Por desgracia, la paz no duró.

Lucha contra la violencia de género mediante un tránsito seguro para las mujeres que viajan de noche

"El voluntariado es una vocación; basta con tener pasión y determinación para ayudar a construir un mundo mejor y más igualitario para todos. Esto es con lo que me identificaba: que algún día podría contribuir a combatir la violencia de género contra las mujeres y las niñas". Estas son las palabras de Bintang Aulia, Especialista Voluntaria de las Naciones Unidas nacional Oficial de Apoyo a Comunicaciones y Medios Sociales de ONU-Mujeres en Indonesia.

Bintang Aulia comenzó su labor de voluntariado en 2016, durante su último año de universidad, cuando se unió a un movimiento por el clima en Bandung. Participó en él durante un año en el que aprendió no solo sobre el medio ambiente y lo que ella puede hacer para ayudar a la Tierra, sino también sobre cómo funciona el voluntariado. 

Lucha contra la COVID-19 mediante el voluntariado en línea

Cuatro Voluntarios en Línea ayudaron al Laboratorio de Aceleración del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en el Pacífico a identificar eventos significativos, soluciones innovadoras así como intervenciones que pudieran ser implementadas en los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (PEID) de la región de Asia y eMuchos candidatos, con una amplia variedad de competencias, dispuestos a apoyar a organizaciones de todo el mundo se registran en la Plataforma Unificada de Voluntariado (UVP) del programa VNU. La UVP es una plataforma de solidaridad y colaboración a la que puedes unirte desde cualquier lugar del mundo y desde cualquier dispositivo. Al igual que los voluntarios que participan en el Laboratorio de Aceleración del PNUD, si deseas formar equipo con organizaciones para abordar los retos del desarrollo sostenible o prestar apoyo a las actividades de respuesta a la COVID-19 desde tu casa, ¡únete ahora!l Pacífico, para hacer frente a la pandemia de COVID-19.

En general, el PNUD presta apoyo a los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo en una serie de áreas temáticas diferentes para abordar las dificultades económicas y las exigencias del desarrollo. Sin embargo, el brote de la pandemia de COVID-19 agravó las vulnerabilidades de los PEID en muchos aspectos, como la interrupción de la cadena de suministro, la inseguridad alimentaria, el suministro inadecuado de agua dulce y la frágil biodiversidad.

Trabajar por la receptividad a las cuestiones de género y los objetivos de desarrollo sostenible

Charlotte German, Voluntaria de las Naciones Unidas Oficial de Finanzas para el Género y el Desarrollo, trabajó durante dos años en el Laboratorio de Financiación Innovadora del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Indonesia. El Laboratorio pretende reducir la brecha de financiación y alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), centrándose al mismo tiempo en las prioridades nacionales de desarrollo. La visión del Laboratorio es ser una plataforma financiera innovadora líder que coopere estrechamente con el gobierno y todas las partes interesadas, internacionales y nacionales, para compartir conocimientos y experiencia con el fin de mostrar las mejores prácticas a nivel mundial.

El principal mandato del PNUD es erradicar la pobreza y reducir las desigualdades mediante el desarrollo sostenible. La misión de Charlotte se centra en estos dos mandatos, que examina a través de un enfoque de género. Trabaja por la integración de la perspectiva de género y la receptividad a las cuestiones de género en la financiación de la lucha contra el cambio climático según la línea de trabajo de Financiación para el Desarrollo Sostenible.  

Voluntariado por la inclusión y el desarrollo de los derechos humanos

Tiffany Chan (Australia/China) se unió a la Oficina Multipaís del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Samoa, las Islas Cook, Niue y Tokelau como Joven Voluntaria de las Naciones Unidas en febrero de 2020. Su misión fue financiada por el Gobierno australiano a través del Departamento de Asuntos Exteriores y Comercio. Actualmente, Tiffany trabaja como Oficial de Apoyo al Desarrollo Inclusivo (Género, Igualdad de Acceso, Juventud y Discapacidad), y reflexiona sobre su experiencia como Voluntaria de las Naciones Unidas.  

Con formación y experiencia en derecho, acceso a la justicia y empoderamiento de la juventud, Tiffany se dedicó a apoyar la cartera de Gobernanza dentro de la oficina multipaís. Al principio participó a nivel programático y de ejecución.

Tejer lazos para reforzar la paz y la seguridad transfronterizas en África Central

Desde los años 90, las zonas fronterizas del Gabón, el Camerún y el Chad se enfrentan a una creciente inseguridad y criminalidad en un contexto de insuficiencia de servicios públicos, falta de oportunidades económicas y de ciudadanos. En apoyo a los esfuerzos del Gobierno para afrontar estos retos, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) lleva a cabo desde julio de 2020 el proyecto Jóvenes Tejedores de la Paz. Este proyecto transfronterizo de dos años de duración se lleva a cabo en colaboración con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y el programa VNU. Su objetivo es crear una red de 1.800 Jóvenes Tejedores de la Paz. Su función es apoyar la consolidación de la paz en las regiones transfronterizas, prevenir la inestabilidad vinculada al tráfico ilícito y formar a 160 jóvenes comprometidos en proyectos de emprendimiento social.

Marie-Noel Verwiyi (el Camerún, 38 años) y Wessi Vaissoulaye (el Chad, 35 años) son ambos Voluntarios de las Naciones Unidas que prestan servicio en la UNESCO y se encargan de formar a jóvenes tejedores de la paz. A través de talleres y cursos de formación, involucran a la juventud en los esfuerzos por la paz y la seguridad y el empoderamiento económico. Esto es fundamental para prevenir el reclutamiento de estos jóvenes por grupos armados y terroristas.

Promoción de los derechos humanos por una paz sostenible en Sudán del Sur

Voluntarios de las Naciones Unidas de diferentes partes del mundo están intensificando la cultura de los derechos humanos dentro de las sociedades. Con sus esfuerzos, ayudan a los países en los procesos de consolidación de la paz y garantizan que nadie se quede atrás. Como promotores del cambio, los voluntarios como Wipanee Chamnanphaison creen que el fomento y la protección de los derechos humanos es fundamental para construir sociedades pacíficas. 

Me llamo Wipanee Chamnanphaison y soy una Voluntaria de las Naciones Unidas de Tailandia. Desde febrero de 2022, trabajo como Oficial de Derechos Humanos en la Misión de las Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS). Trabajo en la División de Derechos Humanos, en la Unidad de Mecanismo Internacional y Creación de Capacidades.